TRASFONDO
Julio Zenón Flores
La contienda por la gubernatura de Guerrero se ha ido
cerrando cada vez más entre los candidatos de las alianzas PRI-PVEM, Héctor
Astudillo Flores y PRD-PT, Beatriz Mojica Morga.
Se han despegado ya tanto de los otros que los candidatos
del PAN, Morena, Movimiento Ciudadano, Partido Humanista, Partido Encuentro
Social, Partido Nueva Alianza y partido de los Pobres, deben ya estar, a estas
alturas, decidiendo qué hacer con los votos que traen de sus simpatizantes. Ir
hasta el final para medir las fuerza real de esa organizaciones partidistas o
venderlos, caro, a uno de los dos abanderados finalistas.
Como se sabe, el político no es sincero, por simple
naturaleza, no puede decir la verdad a la gente, menos en campaña, dice al
público lo que sus asesores le dicen que diga o lo que ellos creen que el
elector desea escuchar; por eso, cuando se creó la frase de que cuando ellos
dicen que sí en realidad es que no, hubo un fundamento sólido.
Co esa óptica hay que escuchar a quienes dicen que no
declinarán por nadie y que llegarán hasta el final, pues mientras más virulenta
su negativa, más cara la tarifa que se pone a sus votos o sus supuestos votos.
La realidad indica que se prepara ya el llamado voto útil
que incline la balanza, a cambio, como se sabe, de una contraprestación que va
desde dinero efectivo hasta compromisos a futuro y cargos en el servicio
público o hasta protección e impunidad en algunos que tienen cola que le pisen.
No hay duda que se vienen las declinaciones a favor de
Astudillo Flores o de Mojica Morga, nadie lo hará por afinidad ideológica, eso
ya no es moneda de cambio en la lucha política guerrerense, será por interés,
pero se darán las declinaciones.
Las más solicitadas son las del PANAL, Morena y MC. El PANAL
es proclive a irse con el PRI, el Morena ayudaría al PRI manteniéndose en la
lucha perdida por la gubernatura y MC, está dudando, entre cogobernar con el
PRD, dando a Beatriz Mojica ese pequeño plus que le falta para asegurar la
victoria o amarrar una alianza con el PRI, manteniendo la candidatura perdedora
de Luis Walton, para restarle votos a la perredista.
Aquí lo interesante es la posible declinación de Jorge
Camacho, que ya se da por hecho, puesto que no es un político de larga escuela,
aunque ha hecho buena campaña no es de los que viven de eso, por lo cual una
decisión práctica es la declinación para asegurar el triunfo de uno de los
candidatos. Camacho se mira más cerca del PRI, si declina, será por Astudillo.
En tanto en Acapulco la fuerza que ha tomado el candidato
verde Joaquín Badillo Escamilla ha sorprendido a todos, al grado de que hay
quienes dicen que rebasó ya en las preferencias al candidato de sus aliados
priistas, Marco Antonio Terán, aunque la debilidad que se le ve es la de la
falta de estructura visible para cuidar y contar el voto el día de la elección,
sin embargo, atrás de Badillo sí hay estructura, no del PVEM, pero sí hay
estructura, que tiene todo lo necesario para ganar.
Eso mete al escenario la posibilidad de una declinación
entre él y el priista Terán. Juntos podrían obtener el triunfo por encima de
los dos que aparecen como favoritos, el del PAN y el del PRD.
0 Comentarios
¿Qué te pareció esta información? ¿Qué nos falta?